Un grupo de personas que participó en la Plaza de Mayo de la celebración del Día de la Lealtad Peronista, a la que asistieron miles de militantes, vandalizó el sitio donde estaban dispuestas cientos de piedras y fotografías en recuerdo de las víctimas del coronavirus.
«Para nosotros esa pierdas son almas», dijo Pablo Musse, que sufrió la muerte de su hija, Solange, a quien no pudo despedir debido a las restricciones que rigieron en 2020 a raíz de la pandemia.



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